Teniendo en cuenta que uno de los dos "Juglares del Duero" (Nino Sánchez) es salmantino, no es de extrañar la cercanía de Salamanca en nuestra trayectoria, la "renaciente maravilla" que inspiró a Unamuno y que reclama una y otra vez la presencia del visitante que haya paseado entre sus muros.
Pero esta vez no se trataba de cantar, sino de todo lo contrario, de escuchar. La Alcaldía de Salamanca tuvo a bien invitar a los Juglares del Duero (y a mí me permitieron llevar acompañante, lo cual es muy de agradecer) al acto de clausura del vigésimo aniversario del nombramiento de Salamanca como Ciudad Patrimonio de la Humanidad. ¡Qué suerte tiene la humanidad con poder contar con esta ciudad entre sus maravillas!.
El Centro de Artes Escénicas y de la Música CAEM fue el escenario elegido para tal evento, con la actuación de la Orquesta de Castilla y León que, bajo la dirección de su maestro titular Alejandro Posada, interpretó un programa en el que las obras de Sarasate "Canciones rusas", op. 49 y "Fantasía sobre temas de Fausto" op. 13. siguieron al poema sinfónico de Mussorgski "Una noche en el monte pelado". En la segunda parte del concierto, la orquesta "clavó" la Sinfonía nº 6 en Si menor, op 74 Patética de Tchaikovsky. (Para mi gusto lo mejor de este compositor, junto con el archifamoso "Lago de los cisnes").
Destacó la presencia del solista invitado Roberto González, un virtuoso violinista que, recientemente, ha sido seleccionado entre 90 prometedores músicos de las escuelas más prestigiosas de Europa para formar parte del reconocido programa de formación organizado por la Fundación Albéniz y la Escuela Superior de Música Reina Sofía que dirige Paloma O’Shea.
Ángel y Nino ("Don Nino", como le trató el encargado de protocolo) iban guapísimos con sus capas bordadas en auténtico paño de Béjar rematadas con broches de plata. ¡Lástima! la cámara de fotos se quedó en casa.
Nino me comentó que en ocasiones se había sentido tentado por abordar composiciones de música clásica. A mí me ocurre otro tanto. Ya hice "mis pinitos" con el oratorio "Vivo sin vivir en mí" en el que puse música a los versos de Sta. Teresa. A veces la composición sinfónica me ronda la cabeza, pero dejemos esto para más adelante; si la divinidad concede largos años de vida, cuando al cuerpo le cause pereza rondar caminos y plazas y prefiera quedarse en casa, entonces será momento para ahondar en la introspección musical y dedicarse a verter sensaciones sobre el papel pautado.
De momento, la música de los Juglares del Duero nace dentro del movimiento que supone el trabajo activo, las presentaciones, los conciertos. A veces resulta necesario un intervalo de soledad para componer una nueva canción, pero con las puertas bien abiertas, para que la tentación de los caminos esté presente en la mente del juglar.
Después del concierto brindamos por diciembre, mes frío, navideño y familiar que augura el cierre del libro de 2008. Borrón y cuenta nueva. Ya andamos pensando en el 2009.
En principio nuestra próxima cita será en Burgos, en el Teatro Principal, Sala de Juntas, Pº del Espolón s/n, por la mañana a las 12.00 h. el 23 de enero de 2009. Allí tenemos concertada una cita con los medios, para presentar nuestro CD y si fuere menester, cantar algunas canciones en directo. La hora es un poco intempestiva para los trabajadores, pero si alguno de nuestros amigos puede realizar una "escapada matutina", estaremos encantados de contar con su presencia.
Pero esta vez no se trataba de cantar, sino de todo lo contrario, de escuchar. La Alcaldía de Salamanca tuvo a bien invitar a los Juglares del Duero (y a mí me permitieron llevar acompañante, lo cual es muy de agradecer) al acto de clausura del vigésimo aniversario del nombramiento de Salamanca como Ciudad Patrimonio de la Humanidad. ¡Qué suerte tiene la humanidad con poder contar con esta ciudad entre sus maravillas!.
El Centro de Artes Escénicas y de la Música CAEM fue el escenario elegido para tal evento, con la actuación de la Orquesta de Castilla y León que, bajo la dirección de su maestro titular Alejandro Posada, interpretó un programa en el que las obras de Sarasate "Canciones rusas", op. 49 y "Fantasía sobre temas de Fausto" op. 13. siguieron al poema sinfónico de Mussorgski "Una noche en el monte pelado". En la segunda parte del concierto, la orquesta "clavó" la Sinfonía nº 6 en Si menor, op 74 Patética de Tchaikovsky. (Para mi gusto lo mejor de este compositor, junto con el archifamoso "Lago de los cisnes").
Destacó la presencia del solista invitado Roberto González, un virtuoso violinista que, recientemente, ha sido seleccionado entre 90 prometedores músicos de las escuelas más prestigiosas de Europa para formar parte del reconocido programa de formación organizado por la Fundación Albéniz y la Escuela Superior de Música Reina Sofía que dirige Paloma O’Shea.
Ángel y Nino ("Don Nino", como le trató el encargado de protocolo) iban guapísimos con sus capas bordadas en auténtico paño de Béjar rematadas con broches de plata. ¡Lástima! la cámara de fotos se quedó en casa.
Nino me comentó que en ocasiones se había sentido tentado por abordar composiciones de música clásica. A mí me ocurre otro tanto. Ya hice "mis pinitos" con el oratorio "Vivo sin vivir en mí" en el que puse música a los versos de Sta. Teresa. A veces la composición sinfónica me ronda la cabeza, pero dejemos esto para más adelante; si la divinidad concede largos años de vida, cuando al cuerpo le cause pereza rondar caminos y plazas y prefiera quedarse en casa, entonces será momento para ahondar en la introspección musical y dedicarse a verter sensaciones sobre el papel pautado.
De momento, la música de los Juglares del Duero nace dentro del movimiento que supone el trabajo activo, las presentaciones, los conciertos. A veces resulta necesario un intervalo de soledad para componer una nueva canción, pero con las puertas bien abiertas, para que la tentación de los caminos esté presente en la mente del juglar.
Después del concierto brindamos por diciembre, mes frío, navideño y familiar que augura el cierre del libro de 2008. Borrón y cuenta nueva. Ya andamos pensando en el 2009.
En principio nuestra próxima cita será en Burgos, en el Teatro Principal, Sala de Juntas, Pº del Espolón s/n, por la mañana a las 12.00 h. el 23 de enero de 2009. Allí tenemos concertada una cita con los medios, para presentar nuestro CD y si fuere menester, cantar algunas canciones en directo. La hora es un poco intempestiva para los trabajadores, pero si alguno de nuestros amigos puede realizar una "escapada matutina", estaremos encantados de contar con su presencia.
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